Ventajas e inconvenientes de trabajar desde casa

• El trabajo a distancia ha proliferado en las últimas décadas gracias al desarrollo de Internet y las nuevas tecnologías.
• Sus defensores aseguran que flexibiliza el horario del trabajador ayudando a conciliar la vida laboral, familiar y personal.
• Sus detractores lo consideran una opción prevaria que aísla al individuo potenciando una sociedad de trabajadores individuales.

El trabajo desde casa ha proliferado en las últimas décadas abriendo un interesante abanico de oportunidades al mundo del empleo. Gracias al desarrollo de Internet y las nuevas tecnologías multimedia el teletrabajo es hoy una realidad para muchos trabajadores.

Es una modalidad de prestación de servicios de carácter no presencial, por la cual un trabajador, a través del teléfono o con sistemas informáticos, desarrolla de modo parcial o total su jornada laboral desde una ubicación distinta a la empresa: domicilio particular, centros de teletrabajo, oficinas satélites, sucursales, oficinas de clientes o distribuidores, incluso bibliotecas, etc.

Su implantación supone una nueva forma de entender el mercado de trabajo y como todo tiene ventajas e inconvenientes, tanto empresarios como para empleados.

Sus adeptos defienden que flexibiliza el horario del trabajador ayudando a conciliar la vida laboral, familiar y personal. Sus detractores, aseguran que aísla al individuo potenciando una sociedad de trabajadores individuales en lugar de apostar por los colectivos.

Ventajas: ecológico, barato y flexible

Desde el punto de vista de los empleados, los expertos aseguran que los trabajadores se sienten más satisfechos, motivados y con menores niveles de estrés trabajando en casa.

Ya que se eliminan los desplazamientos entre el lugar de trabajo y la residencia del trabajador, se reducen los atascos y el gasto en transporte público.

Además, los conflictos que el trabajo ocasiona, a menudo, en la familia, pueden disminuir puesto que el trabajador puede conciliar mejor su vida personal con la profesional gracias unos horarios más flexibles.

Finalmente el teletrabajo también puede reducir los gastos en el cuidado de los hijos, al disminuir el tiempo que se está fuera de casa.

A nivel social, esta modalidad de trabajo facilita la integración en el mundo laboral de personas con dificultades de desplazamiento (discapacitados, madres con bebés, hijos al cuidado de personas mayores, etc.).

Además, al no haber desplazamientos se evita la concentración de la población en grandes núcleos urbanos (con las ventajas que esto supone para el medio ambiente) y se puede conseguir repoblar zonas rurales.

Desde una perspectiva empresarial el teletrabajo supone un gran ahorro logístico, puesto que las compañías pueden reducir sus costes al alquilar oficinas más pequeñas, además de evitar facturas en electricidad, agua, calefacción, Internet, o suprimir los servicios de servicio de limpieza, vehículos de empresa, teléfono o dietas

Inconvenientes: solitario y precario

Pero no todo son pros. A menudo el teletrabajo supone empleos más precarios y no todo el mundo dispone de un espacio propio en el hogar en el que ejercer su tarea, algo muy importante cuando en la casa también residen niños o animales, por ejemplo, lo cual puede interferir en el buen desarrollo de la jornada laboral (niños corriendo, discusiones de pareja…).

Por otra parte, al trabajar en soledad, no hay contacto con compañeros de trabajo y con los jefes. No tener contacto con los superiores puede perjudicar al empleado al obtener un ascenso. Los anglosajones definen este hecho con la frase «out of side, out of mind» (fuera de la vista, fuera de la mente).

 

Los expertos aconsejan teletrabajar un máximo de tres días a la semana, para no alterar demasiado las rutinas y no desvincularse del todo del ambiente laboral.

A nivel empresarial, los inconvenientes se relacionan con una cuestión de efectividad y productividad, ya que hay menos control sobre el teletrabajador, se pierde la comunicación y es difícil crear un ambiente de trabajo.

Además disminuye la seguridad en las transmisiones de datos a través del ordenador, y no todas las empresas pueden afrontar los costes de una tecnología adecuada para el teletrabajo.

Finalmente, el teletrabajo favorece una sociedad moderna, pero aislada, formada por individuos y no por colectivos.

Fuente original: 20minutos.es